El 2022, el Comité para la eliminación de la discriminación contra la mujer (COMITÉ CEDAW), en su Recomendación general número 39, reconoció que las mujeres y las niñas indígenas tienen acceso limitado a servicios de salud, incluidos los procedimientos de salud reproductiva, aunado a que su derecho al consentimiento previo, libre, pleno e informado no es respetado. Es por esto que, las mujeres y otras personas con capacidad de gestar que pertenecen a comunidades indígenas son propensas a sufrir violencia obstétrica.
En esta realidad, el Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva (CNEGSR) emitió el Programa de Acción Específico para la Salud Sexual y Reproductiva 2020-2024, que establece la obligación de garantizar el derecho a la salud reproductiva desde una perspectiva interseccional, lo que trae consigo que las necesidades de las mujeres y otras personas gestantes indígenas sean tomadas en cuenta. Por ello, este Programa reconoce la necesidad de contar con enlaces interculturales entre el personal médico y las mujeres indígenas, al momento de proveer servicios de salud reproductiva, con la finalidad de fortalecer la salud materna y que auxilien en la atención del embarazo y puerperio.
Estas cápsulas de radio, sobre violencia obstétrica, fueron posibles gracias a los esfuerzos colaborativos de GIRE, del Instituto de Liderazgo Simone de Beauvoir, así como de la Red Oaxaqueña de Mujeres Indígenas Trenzando Saberes, la Red de Mujeres Unificando Fuerzas Ko’olel y la Red de Mujeres de los Pueblos Indígenas y Afrodescendientes de Chiapas (REMIAC).
Red Oaxaqueña de Mujeres Indígenas Trenzando Saberes
Red de Mujeres Unificando Fuerzas Ko’olel
Red de Mujeres de los Pueblos Indígenas y Afrodescendientes de Chiapas (REMIAC)